Después de una campaña electoral más parecidas a las generales, que a una para las municipales -que es para lo que eran-, parece que los "electos", se olvidan de todas sus promesas, por lo menos en grado de interés para los ciudadanos y se dedican a las cosas posiblemente menos sustanciales, aunque puede que no faltas de importancia.
En Sevilla mi "amigo juez" de Lanzarote, Juan Ignacio Zoido ha declarado que lo primero que hará será cambiar los bancos y farolas de diseños moderno, por otras de tipo fernandino. De farolas e iluminados en Cádiz sabemos bastante. Teófila Martínez en su primera etapa de gobierno de la ciudad, una de las primeras medidas que tomó, fue cambiar las farolas del Campo del Sur, aquellos báculos rectos, con luminarias fluorescentes; que prometió reciclar -solo lo hizo con una-, por fernandinas de fundición, que hoy en día lucen una impresionante pátina de óxido por falta de manteniendo.
Por lo visto, o el libro de estilo municipal del Partido Popular no ha cambiado en estos años o Zoido ha tomado nota del magnífico y exitoso negocio de Don José Blas Fernández, con la compra de las fernandinas en China; como no podía ser de otra forma, haciendo lo contrario a lo que predican, dando ejemplo de generar riqueza en el país y lo que nos rondará morena.
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