Antes de utilizar las redes sociales como Facebook y Twitter y hacer algún que otro curso sobre las mismas, usaba más a menudo este medio, el blog; que por cierto lo cree tras un curso con uno de los mejores blogueros del mundo.
Hay veces que comienzo algún hilo en esas redes y me doy cuenta que las respuestas no se pueden dar por allí; hay que alargarse algo en la exposición, pero sin extenderse hasta el punto de hacerse cansino.
Tras los últimos casos - que no serán los únicos - sobre corrupción en el pais, parece que la consigna de muchos medios -¿linea editorial, pagada? - de comunicación ha sido el meter a todo el mundo en el mismo saco, el predicar que el que no ha robado; es porque no ha podido.
Bueno será porque he podido y no lo he hecho y no por ello me considero tonto, me considero integro y no pocos quebraderos de cabeza me ha traído y creo difícil que se remedie, me continuarán trayendo.
¿Quien se preocupa de que una escalera de aluminio de 6,5 metros, según acta de un organismo oficial haya costado cerca de 4.000, euros? a pocos, solo a los que vamos por el desierto de la vida y somos capaces de irnos de frente contra ese único poste; con lo fácil que es irse un poquito a la derecha y "pasar olímpicamente".
¿Alguien se preocupó durante años de que al hacer un curso profesional en la Escuela de Suboficiales de la Armada, por "tradición" un pellizco de un corto sueldo que era irregular a todas luces? "Desgaste de patio", decían los "tradicionalistas", que no mostraron queja alguna cuando se les reintegró el dinero que les había "sisao" gracias a una sola y única instancia.
Hay más, muchas, demasiadas. Como aquella interrogación que me hizo un jefe una vez puse en su conocimiento, que había sido objeto de una propuesta para que expidiese un certificado, donde me daban como pago un "fajo" de billetes, que el "horado" ciudadano portaba y que fue la siguiente "Don Eulogio ¿Quien firma los certificados? la respuesta fue la lógica "Yo, con su visto bueno", lo anormal fue su sentencia "No lo olvide para la próxima".......
En definitiva, parece ser que lo que se lleva ahora es el defender a los que se están viendo acosados primero por la opinión pública, después por la policía y jueces.
He usado muchas veces la frase de uno de los pasajes de "El Lazarillo de Tormes" esa cuando el ciego le dice al lazarillo "¿Sabes en qué veo que las comiste tres a tres? En que comía yo dos a dos, y tú callabas"; y creo que no es esa la realidad de este País, esperar que alguno se como las uvas de dos en dos para tratar de comérselas de tres en tres; aún hay gente que avisamos " Te has confundido al coger las uvas" y por eso nos suelen llamar "negativos".