Ya poco nos puede sorprender. Me gustan las cosas "vivas",
plantas, animales.... No se me ocurre anegar un drago - tengo uno - poner unos
cactus en agua o unas plantas de sombra a pleno sol. No soy técnico, pero
conozco a personas que lo son y tras charlas te das cuenta de las "locuras"
que se hacen en esta ciudad a la hora de elegir y colocar los árboles tras una
"reurbanización" - mi definición creo que es conocida "destrucción
de lo existente para dejarlo peor" -. Tengo constancia de que no faltan advertencias
de quienes saben y conocen la materia, pero prevalece la "iniciativa
política" y de esta forma así nos va.
El drago "menor" de la Plaza de Mina, no ha sido ni será el
último; ya os diré cuales son los siguientes en caer. Pero bueno, como son
"menores"... como con nuestra juventud, no importa que se tengan que
ir, que se marchen, que desaparezcan; por la indolencia de los mayores.
De momento hablamos de los dragos, pero lo de las palmeras; algunas de las que se han plantado con sus grandes huecos de haber sido ya tratadas por venir afectadas por el
picudo rojo…¿Eran regaladas?.
Un patrimonio los árboles y plantas de esta ciudad maltratado. En al imagen uno de los dragos que se encuentran "en capilla".
