28 de abril de 2007

Como nos complican la vida en nombre de la Libertad.


Lo había visto en televisión, oído y leído.... y estuvo a punto de ocurrirme. El abuso de autoridad por parte de a quien su "celo" en el cumplimiento de sus obligaciones, le lleva hasta el "porque yo lo digo" encima acompañado de un tono y unas formas hirientes, que te hacen sentirte ninguneado, ¿y todo? por querer hacer una fotografía de un buque y desde un lugar público.
Intente - a la primera no me dejaron - acceder a la Estación Marítima de Cádiz, por la puerta de República Argentina -con mi cámara de fotos en la mano- cuando una vez traspasado el acceso y dar los buenos días a los señores guarda-muelles, cuando uno de ellos, se dirigió a mi preguntando donde iba.
Le respondí que hacer una foto al ClubMed2, que estaba atracado a la altura de la Estación Marítima. Me indicó "que no se hacen fotos, salvo que fuese prensa", a lo que le indique que entraría en la estación y desde allí, haría la foto. Indicando que "de eso nada".
He de mencionar, que el acceso a la Estación Marítima es libre, no solo a ésta si no a la Capitanía Marítima que se encuentra en la planta superior o a cualquiera de los servicios que se encuentran ubicados en dicho edificio.
Conozco perfectamente la prohibición de circulación por las zonas de trabajo portuario hoy en día, y más por mi profesión y que esos muelles fueron mi lugar de trabajo durante varios años "Suboficial de la Armada Celador de Puerto y Pesca".
Pues a mi solicitud de a que autoridad, me tenia que dirigir para solicitar autorización, otro compañero de este señor, me indicó "en la plaza de España número 17", di las gracias, retome mis pasos y me dirigí al edificio de la Autoridad Portuaria.
La atención en dicho centro fue excelente, explique cuales eran mis intenciones y lo que me había ocurrido a los señores de recepción, que eficazmente, hicieron unas llamadas telefónicas y me indicaron que regresase al puerto y fuese a ver al Comisario; que se lo comunicase al guardamuelles.
Al llegar de nuevo al los accesos, el señor Celador Guardamuelles, me vuelve a preguntar "adondeva", con tono aun mas elevado y cara algo descompuesta.. "voy a ver al Comisario, que me está esperando, es quien me debe autorizar"; aquí salta de nuevo la sorpresa, me solicita "por escrito, un papel, ¿que como me va a creer?" - ahora me río, ayer no.. - a lo que le respondí "que como le iba a dar una autorización, para ir a ver a la persona, que me tenía que dar otra autorización, que eso era totalmente ridículo". En este punto, le dije que me iba a ver al Comisario y me contestó, "que con la cámara no entraba, que la tenía que dejar", preguntado porque, me dijo "porque lo digo yo" todo esto en un tono de voz elevado y con aspavientos.
Ante la falta de entendimiento, opte por decirle que no, que me dirigía a ver al comisario.. Y aquí es cuando comienzan los grito.. "Le voy a detener... " tomo su transmisor y se puso a gritar "compañeros, que hay que detener a un individuo aquí". Con el cariz del asunto, opte por pararme y volver sobre mis pasos.. diciéndole de nuevo que el comisario, me esperaba, que lo llamase...
Por fin .... algo de cordura debió aparecer por la mente de este señor celador guardamuelles, que hizo una llamada telefónica. A su regreso de la garita, me indico en tono mas suave y en formas más correctas, "que el comisario me esperaba"... indicándome el lugar al que me debía dirigir.
Me recibió correctamente el Sr. Comisario, le dije mis intenciones.. le informe de mi conocimiento de toda la normativa portuaria y por supuesto del "exceso de celo, mal entendido", del guardamuelles. Recibí autorización para hacer la foto.
Por una vez, me alegro de la ineficacia de alguien, pues si los compañeros a los que este señor solicitó ayuda para detenerme; llegan antes, no sé que hubiese ocurrido.. porque yo, no me habría resistido a esa detención.
Mi mente se inundó con el recuerdo de la Semana Santa de 1973, en Sevilla, viernes Santo, carretera Cristo de la Expiración - Chapina - , donde por tocar las palmas, fui introducido en un Land-Rover de la Policía Armada y mi cara recibió lo que no hay en los escritos, entonces; tenía 17 años, hoy 51.. pero parece ser, que algunas cosas no han cambiado. Tan penoso fue entonces, como ahora.
Mientras hacía mi "Fotografía autorizada", varias personas a mi lado, junto al cantil; disparaban sus cámaras fotográficas al mismo barco que yo lo hacia, a la vez que tomaban imágenes de todo. Paradojas de la vida.
Al salir del recinto portuario, me despedí de los guardamuelles, a la vez que les indicaba.. "hay personas haciendo fotos..", a lo que recibí la respuesta de "a mi solo me interesa lo que entra por aquí"; en ese momento tuve que ceder el paso a cinco personas, que accedían al muelle, con cuatro cámaras de fotos... parece ser que mi cámara es taliban o puede tener la propiedad de captar algo inoportuno.
La imagen.. "Foto autorizada".


2 comentarios:

Anónimo dijo...

En este pais seguimos con distablanda, nos permiten cambiar del PP al PESOE para conformarnos y darnos.
Siguen los mismos.
!Viva la republica¡
Salud compañeros.

Anónimo dijo...

Eulogio, a un borrego le pones una gorra y se cree Capitan General. Yo me hace eso y de la irritacion le dejo la cámara voy por la pipa y le arreo un susto que lo doblo, porque si soy delincuente me tienen más respeto

Cádiz, trimilenaria ¿Por paciencia?

La ciudad más antigua de occidente, de la que todos/as se enamoran, pero a veces tanto amor, no deja ver como algunos/as la maltratan.